El Consorcio de Exportadores de Carne de Argentina advierte que la medida es un retroceso y atenta contra la producción de carnes. FIFRA, por su parte, defiende la medida y destaca que beneficia al criador y productor ganadero. Ambas fundamentan sus posturas.
El miércoles, la secretaría de Agroindustria estableció modificaciones en los pesos para faenar animales bovinos, pero que sólo que modifica el peso mínimo de faena en hembras (no en machos) fijándolo en ciento cuarenta kilogramos (140kg) peso res con hueso.
Frente a esta nueva decisión, entidades referentes como el Consorcio de Exportadores de Carnes de Argentina (ABC) y la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (FIFRA) se expresaron, de manera negativa y positiva, respectivamente, ante la nueva resolución adoptada desde el gobierno. Los feedloteros, ya habían tomado previo a la resolución su postura, manifestada tras un relevamiento de encuesta de la Cámara Argentina del Feedlot (ver aquí)
“Consideramos que se ha retrocedido de manera categórica en la recuperación de la producción de carnes”, destaca el Consorcio ABC, argumentando que con la resolución adoptada se producirá menos volumen de carnes, a contramano total de las políticas de los países competidores, que incentivan permanentemente la faena de animales pesados y la recuperación en kilogramos del stock ganadero.
“Argentina volverá a tener medias reses de 70 kg en su comercialización de carnes, favoreciendo a determinados intereses particulares y castigando al bien general de todos los operadores de la cadena de ganados y carnes”, destacó en un comunicado.
Además, afirma que “la resolución adoptada incentiva la operación de los sectores informales que son los interesados en contar con hacienda liviana”, y explica que los perjuicios de medidas como estas ya han sido evidenciados anteriormente. “En efecto, cuando con carácter de excepción se bajo el peso de faena de la hembras por un periodo de tres meses, se mataron 73.000 animales livianos más que en el mismo trimestres del año anterior. Esto significó una pérdida en el peso promedio de faena de hembras de 6 kg, y una pérdida de producto de 5.300 toneladas de carne. Con la nueva medida Argentina producirá 22.000 toneladas de carne menos al año por un valor de 100 millones de dólares”, alertan.
Por otra parte, la cadena frigorífica representada por FIFRA destaca positivamente la medida, ya que fue solicitada desde hace muchos años por la entidad. “Consideramos que existen sobradas razones técnicas de índoles biológicas, regiones productivas, razas de hacienda, disponibilidad de alimentos, económicas y financieras, que determinan que el peso mínimo de faena debe ser diferente para machos y hembras”, subrayan.
La Federación entiende que con esta medida también se pone fin a una situación que generaba negocios para pocos en detrimento de muchos. “La composición de las categorías de faena de los últimos cinco años está compuesta por un 60% de categorías livianas (teneros, novillitos y vaquillonas) y dentro de éstas el 15% está representado por terneras; esto significa que el sector productor tiene que vender con destino a faena aproximadamente 2 millones de terneras por año, y, con la vigencia de un peso mínimo de 300 kilogramos, debían soportar en el precio el castigo por la ineficiencia de conversión de ese animal respecto del macho. La decisión del Secretario implica una ayuda económica indirecta pero efectiva a los productores; implicará un mejor valor para la venta de las terneras en la presente zafra, y para los que dispongan de alimentos, poder venderlas terminadas y así mejorar sus ingresos. Es una clara medida de ayuda al criador y productor ganadero”, explica, al tiempo que manifestaron que “en virtud de la caída en la cantidad de animales encerrados en corrales hacia finales de 2018 y comienzo de 2019, consideramos que esta medida ayudará para que haya en lo inmediato un mayor encierre y consiguientemente una reactivación de ese sector”.
FIFRA remarcó en su postura que esta decisión no ocasiona una menor producción de carne sino que “permite que muchos teneros vayan a la producción de novillos porque el consumo estará suficientemente abastecido”.
CICCRA también se pronunció
La Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la Republica Argentina también se refirió a la postura de la secretaría ante la medida adoptada: “Parece temerario y hasta irresponsable que Agroindustria resuelva bajar el peso de faena de hembras para que algunos, muy pocos, hagan un negocio financiero con la vaquillona cada vez más liviana a expensas del resto de la cadena. Son menos kilos para la industria y los consumidores argentinos y menos kilos de carne para abastecer la demanda exportadora. La hacienda y la carne no se pueden “fabricar” de un día para el otro”, alertaron.
“Según nuestros cálculos, ese faltante será de cerca de 500.000 terneros en el año 2020, cuando se verán los efectos de la política ganadera aplicada ahora, traducida en freno de la producción y las exportaciones y aumento de precio para los consumidores locales”, alertaron.
Fuente: http://www.todoagro.com.ar/noticias/nota.asp?nid=37894
Como esperamos darle previsibilidad al negocio ganadero si permanentemente se cambian las reglas, armamos un esquema de produccion, invertimos en tecnología, capacitamos gente para alimentar, organizamos un proceso de recria a campo con pasturas artificiales y ahora por una necesidad de tener carne y como aumenta su precio se genera una producción extra buscando que caigan los precios cambiando las reglas de juego. El que invirtió en un proceso de Recria ahora queda fuera del mercado con un producto pesado para lo que tiene que competir. Otra vez Argentina Ganadera IMPRESENTABLE
Hola Hugo, muchas gracias por sus comentarios. Saludos